laMANCHA
deCERA
MARIA ALONSO SANTAMARIA
MARIA ALONSO SANTAMARIA
¿Qué queremos trabajar...?
Con este cuento queremos trabajar la vergüenza y la culpa.
La mancha de cera
1º a 4º Primaria
Julio y su primo Borja, como muchos sábados, jugaban en el salón de la casa de los abuelos.
Borja sacó las pinturas de cera de su mochila y estuvieron pintando un buen rato. Al poco tiempo, Julio se levantó para ir un momento al baño. Detrás Borja, se levantó también para ir a la cocina a beber agua. Sólo dio el primer paso y notó que había pisado algo sin querer.
Cuando miró a sus pies vio una gran mancha roja en la tarima de madera de la habitación. Intentó limpiarla con un trozo de papel, pero lo único que consiguió fue que la mancha se hiciera más grande.
-Ding, dong- llamaron a la puerta.
-¡Nos vamos Julio! ¡Papá espera en el coche! Ha habido un contratiempo y tenemos que volver a casa pronto –le dijo su madre con prisas.
Julio se despidió de sus abuelos y de su primo apresuradamente, y se marchó con su madre. El abuelo entró en la habitación distraído.
-¿Qué ha pasado aquí?- preguntó a su nieto cuando vio la mancha en el suelo. Borja agachó la cabeza.
-Ha sido Julio – contestó en voz baja.
-¡A ver como limpio esto yo ahora! ¡Está todo manchado de rojo!
El abuelo fue a por un trapo y restregó el suelo durante un buen rato. Luego su abuela acabó de limpiar la madera con un producto especial. Los dos acabaron muy fatigados.
Por la tarde, de vuelta a su casa, su madre le preguntó:
-¿Qué tal lo has pasado?
-Bien-Contestó Borja.
-Te noto algo raro-le dijo. Pero el niño no contestó nada.
Por la noche, cuando se acostó, Borja estaba muy inquieto. Su padre le contó un cuento al que apenas prestó atención. Sentía que no se había portado bien con Julio ni con sus abuelos. En realidad, no sabía el motivo por el que había mentido, y ahora se encontraba muy mal. El domingo se levantó muy cansado.
-¿Te encuentras bien? –le dijo su madre poniéndole la mano en la frente.
Entonces Borja, que no había probado el desayuno, se puso a llorar.
-¿Qué te ocurre? –preguntaron sus padres alarmados.
-No me he portado bien con Julio y he mentido a los abuelos. – contestó hipando.
Borja les contó lo que había sucedido. Sus padres lo abrazaron.
-Borja, tienes buen corazón. No pasa nada. Lo que estás sintiendo se llama culpa. Luego llamas a los abuelos y se lo cuentas. Cuando habló con sus abuelos, solo le dijeron:
-Si otro día ocurre algo así nos lo dices en el momento. No le diremos nada a Julio. ¡Sólo ha sido un pequeño accidente!
Borja sintió un gran alivio contando a sus padres y a sus abuelos lo ocurrido y se quedó con la conciencia muy tranquilo.
Actividades
1.Realizar, de manera oral, entre todos, la reconstrucción del cuento.
2.¿Cuál es la relación entre Julio y Borja? ¿Son amigos?
3.¿Cómo se ha manchado el suelo?
4.¿A quién culpa Borja cuando su abuelo le pregunta?
5.¿Cómo se sentía Borja?
6.¿Qué hace Borja para sentirse mejor?
7.¿Cómo crees que actúan los padres? ¿Y los abuelos?
8.¿Qué hubiera pasado si su actuación hubiera sido diferente?
RECURSOS
Cortometrajes
"Cuerdas"
Respuestas
¿Qué diferencia había entre una vasija y la otra?
Una de las vasijas tenía varias grietas, mientras que la otra era perfecta y conservaba toda el agua al final del largo camino a pie desde el arroyo hasta la casa de su patrón, pero cuando llegaba, la vasija rota solo tenía la mitad del agua. Durante dos años completos esto fue así diariamente.
¿Qué enseñanza nos deja está lectura de las vasijas agrietadas?
Pues, que debes conocer tus grietas y darte provecho de ellas, sin avergonzarte ni ocultarlas, porque cada una de esas grietas te hace quien eres, y el simple hecho de tenerlas te convierte en alguien único y maravilloso.
¿Qué dijo la vasija agrietada?
Te pido disculpa porque debido a mis grietas sólo puedes entregar la mitad de mi carga y solo obtienes la mitad del valor que deberías recibir.