escapandoDEun
SECRETO
PEDRO PABLO SACRISTÁN
PEDRO PABLO SACRISTÁN
¿Qué queremos trabajar...?
La vergüenza, el apego, la culpa, el miedo y la envidia.
Escapando de un secreto
1ºa 6º Primaria
Hace mucho tiempo, había un país en el que todo eran sorpresas, regalos sorpresa, visitas sorpresa y mil sorpresas más. Niños y mayores las preparaban a escondidas con gran ilusión y cuidado. Luego, cuando llegaba el gran día, se descubría la sorpresa y todo se llenaba de alegría.
Vivía en el país vecino el señor del Silencio Oscuro, quien sentía tanta envidia por aquella felicidad continua, que decidió acabar con ella usando la peor de las armas: los secretos. Los secretos eran casi idénticos a las sorpresas, pero había una cosa que los diferenciaba: ellos odiaban la fiesta y la alegría, y nunca querían salir totalmente de su escondite.
Viajaban escondidos, siempre de una persona a otra, colándose en sus , y usando mil trucos para no ser descubiertos. De todos modos, su truco favorito era el miedo, haciendo creer que pasarían cosas terribles si se llegara a descubrir el secreto. Pero en todo lo demás, el parecido con las sorpresas era tan grande, que el malvado pensó que nadie llegaría a diferenciarlos.
Así que el señor del Silencio envió a sus fantasmales sembradores de secretos al país vecino, y estos consiguieron llenarlo todo de secretos, miedos y susurros. Las sorpresas fueron desapareciendo, y apenas quedaban niños que no tuvieran atrapado el corazón por un secreto.
Pero entonces Laura, una de aquellas niñas atrapadas, descubrió que su se estaba haciendo cada vez más pequeño y triste. Y superando su terrible miedo le contó el secreto a su mamá para ver si podía ayudarla.
El secreto voló veloz hasta el de su mamá, dispuesto también a atraparla, pero al tocarlo, el secreto explotó en mil pedazos dejando libre a la niña. ¡Menuda sorpresa! Nadie, ni siquiera el señor del Silencio, sabía que los secretos no pueden atrapar al mismo tiempo el de una madre y el de su hija, porque están unidos por un amor especial que ni siquiera el miedo puede romper.
Laura, sintiéndose otra vez libre y alegre, corrió a contárselo a todos sus amigos. Estos, según fueron hablando con sus mamás, vieron cómo sus secretos estallaban y obligaban a los sembradores de secretos a volver a su oscuro y triste reino.
Y libres del miedo y felices de nuevo, jamás volvieron a preocuparse por los secretos, pues sabían cómo diferenciar perfectamente una sorpresa de un secreto. Bastaba con contárselo a mamá, porque al compartir sus corazones las sorpresas los llenaban de alegría y los secretos estallaban en mil pedazos.
Actividades
1.¿Cómo era el país inicialmente?
2.¿Qué sentía el señor del Silencio Oscuro hacia las gentes de ese país?
3.¿Qué trucos utilizó para manipular a los niños de ese país?
4.¿Cómo se sentían los niños después de aparecen los fantasmales sembradores de secretos?
5.¿Consiguió su objetivo? ¿Por qué?
6.¿Cómo fueron capaces los niños de diferenciar una sorpresa de un secreto? ¿Quién les ayudó?
RECURSOS
Cortometrajes
"Cuerdas"
Respuestas
¿Qué diferencia había entre una vasija y la otra?
Una de las vasijas tenía varias grietas, mientras que la otra era perfecta y conservaba toda el agua al final del largo camino a pie desde el arroyo hasta la casa de su patrón, pero cuando llegaba, la vasija rota solo tenía la mitad del agua. Durante dos años completos esto fue así diariamente.
¿Qué enseñanza nos deja está lectura de las vasijas agrietadas?
Pues, que debes conocer tus grietas y darte provecho de ellas, sin avergonzarte ni ocultarlas, porque cada una de esas grietas te hace quien eres, y el simple hecho de tenerlas te convierte en alguien único y maravilloso.
¿Qué dijo la vasija agrietada?
Te pido disculpa porque debido a mis grietas sólo puedes entregar la mitad de mi carga y solo obtienes la mitad del valor que deberías recibir.